lunes, 13 de mayo de 2019

Desde mi azotea



Veo salir el sol.
No tengo tiempo para despedirme de la luna y ya me sonríe el sol.
El cielo se ha mudado.

No hay errores.
Solo hubo flaquezas que me llevaron al final del abismo.
Pero tú me has salvado.

Paré el reloj.
El tiempo caminó sin rumbo fijo hasta que llegaron las 10.
El tiempo paró y empezé a dudar.

Dudé y fallé.
Ni un segundo de dudas frenó la avalancha de verdades.
Fallé pero te encontré.

Acariciabas mi pelo.
No tuviste tiempo para despedirte de mí.
El cielo se ha nublado.

No hay amor.
Solo hubo un oscuro deseo de no sentirme solo.
Y tú me has ayudado.

Cerré los ojos.
El día siguió danzando con pies descalzos.
El velo negro de la noche llegó y dudé.

Dudé y fallé.
Ni un segundo de dudas frenó la avalancha de verdades.
Fallé pero te encontré de nuevo.